Una vez más reaparece el día de ayer, ya dado por muerto y por enterrado. Otra vez desaparece el silencio y me amanece otra vez a nuestro lado No sé si será pecado. A mí no me lo parece.
Manuel Alcántara
jueves, 7 de enero de 2010
Me impregnas los amaneceres de tu vértigo, de esa insondable tristeza de los sueños y aún así en el rehabilitado círculo de espera te cabe un mundo quieto para inundarme el alma. Fernando Sarría